- 120 g de azúcar glace
- La piel rallada de un limón
- 130 g de leche (unos 150 ml)
- 70 g de mantequilla
- 2 huevos
- 30 g de levadura fresca
- 30 g de agua de azahar (unos 40 ml)
- 500 g de harina
- 1 pizca de sal

Cómo hacerlo:
1.- Mezclar la ralladura de limón con el azúcar en polvo
2. Separar un poco de leche (caliente) para desleir la levadura. Poner el resto de la leche junto con la mantequilla a fuego suave hasta que ésta se funda por completo
3. Verter en un cuenco alto y añadir el azúcar con la ralladura, los huevos, la levadura desleída en la leche y el agua de azahar. Mezclar con batidora eléctrica hasta que esté todo bien homogéneo
4. Ir poniendo la harina de poquito en poquito, hasta conseguir una masa que se maneje bien aunque se pegue un poco a los dedos (insisto, "un poco", si fuera necesario, se puede añadir algo más de harina)
5. Dejar que suba la masa hasta que triplique su volumen
6. Volver a amasar para sacar el aire. Colocar sobre una superficie enharinada y amasar otra vez, sólo un minutillo. Ponerla sobre una bandeja de horno cubierta de papel vegeta y darle forma de aro. Colocar en el agujero un vaso resistente al calor ( uno de barro, por ejemplo) que después llenaremos de agua a la hora de hornearlo
7. Insertar la sorpresita ( si no, no tiene gracia!!)
8. Pintar la superficie con huevo batido y decorar con frutas escarchadas, azúcar, almendras fileteadas,...
9. Dejar que suba otra vez, hasta que doble el volumen.
10. Precalentar el horno a 180ºC. Llenar el vasito del centro con agua y meter el roscón unos 25-30 minutos, hasta que esté doradito y al pinchar con una aguja en la masa, ésta salga limpia
